Descripción enviada por el equipo del proyecto. El pequeño pueblo de Ciglié es un pueblo de pocas casas encaramado en las colinas de las Langhe, entre Ceva y Cantù, elegido por un matrimonio de Rotterdam, para conseguir un lugar en Italia donde vivir algunos meses del año. El castillo medieval de Ciglié, viñedos, nogales y avellanos, y las magníficas vistas sobre Mondovì y todo el arco alpino son algunos de los elementos que inspiraron esta pequeña arquitectura. La casa de 110 m2 construida sobre una pendiente pronunciada de 2000 m2 consta de una sala de estar e incluye dos dormitorios, dos baños, un trastero y un amplio pórtico. Una casa de vacaciones específicamente concebida para los propietarios y sus invitados, donde los espacios se han reducido voluntariamente al mínimo.
Acercándonos al terreno desde la carretera río arriba, el edificio aparece frente a nuestros ojos incrustado en la ladera del cerro, mientras que el carácter del entorno permanece inalterado. Solo se ve la cubierta, como si se tratara de una quinta fachada del edificio. El volumen, cerrado por tres lados, se abre inesperadamente a Mondovì y los Alpes. Una única ventana de gran tamaño sobre las Langhe, con paneles de vidrio de 9m x 3m y un gran pórtico, que atraviesa el corazón de la casa, se convierte en un escenario magnífico para todos los días. Esta pequeña arquitectura está completamente revestida de ladrillo, 21.500, colocados por un cualificado albañil local. Una mampostería continua cubre cada fachada y las pendientes inclinadas del techo. En la fachada lateral, la luz de la ventana de la habitación de invitados está filtrada por ladrillos colocados en forma de "Cruz Suiza" que permiten vislumbrar el Castillo de Ciglié desde el interior de la casa. En la fachada principal, la puerta de acceso al trastero también está cubierta con ladrillos.
Las chimeneas y el gran lucernario de la cubierta, con sus superficies inclinadas de ladrillo a vista, aparecen como folies arquitectónicos que no afectan a la configuración monolítica del edificio, sino que rediseñan su perfil convirtiéndose en parte del horizonte. Una amplia terraza construida con 35 grandes troncos de madera maciza completa la relación entre el espacio interior del edificio, el pórtico y el jardín. Los elementos de madera que descansan de forma natural en la ladera del cerro crean una gran escalera que conduce al jardín. Un portal de hierro pintado de 4 metros de altura ubicado en el borde de la carretera define la entrada a la propiedad y, como obra de land art, enmarca el paisaje de las Langhe y la casa, que ahora se ha convertido en parte del paisaje. El resultado final de este proyecto ha sido posible gracias a la sinergia creada entre la empresa de construcción y los artesanos locales, gracias al cual se ha podido realizar lo que hasta entonces solo se había imaginado y dibujado en papel.
Continuous brickwork covers each facade and the sloping pitches of the roof. On the side prospect, the window of the guest room is covered with shading bricks laid in “Swiss Cross” allowing a glimpse to the Castle of Ciglié from the inside of the house. On the main prospect, also the access door to the storage room is covered with bricks.
The chimneys and the big skylight on the roof, with their inclined surfaces of exposed bricks, appear as architectural follies that do not affect the monolithic configuration of the building but redesign its profile becoming a part of the skyline. A wide terrace built with 35 large solid wood trunks complete the relationship between the closed space of the building, the portico, and the garden. The wooden elements resting in a natural way on the slope of the hill, create a sort of large staircase leading to the garden.
A painted iron portal 4 meters high located at the edge of the road defines the entrance to the property and, as a work of land art, frames the Langhe and the house, which has now become part of the landscape The great fortune of this project is due to the encounter with the enterprise and local artisans, thanks to whom it has been possible to realize what until then had only been imagined and drawn on paper.
